lunes, 18 de mayo de 2009

Quiero Dormiiiiiiiiiiiir.

Siento decir que no, no me ha llegado hasta este momento todas esas emociones que con precipitación y faltas de escritura (¡pardiez! lo que hace el estar con la hiperactividad por las nubes) os describía esta mañana. En concreto, la que más echo en falta es la falta de cansancio, que se ha convertido en un cansancio épico, y es la que me va a impedir subir esta noche el texto. A no ser que dentro de un rato me espabile y me dé otra oleada de hiperactividad y me ponga a pasar cosas al ordenador como alma que lleva el diablo.
Pero no sufráis, que, a lo tonto, tengo historia para un rato. De hecho, podríamos incluso llamarlo novelita. Estoy contenta. 10 caras de manuscrito es motivo para estarlo. Y tengo en mente otras tantas, mínimo. Aunque no lo digo muy alto y cruzo los dedos. Como quiero ahcerlo bien, iré escribiendo cada vez que mi gusanillo me visite. Ahora mismo seguiría rellenando páginas y páginas, pero creo que si toco un solo boli más por hoy, explotaré. De hecho, no creo que tenga fuerzas para levantar un boli. Es más aún, no sé ni cómo tengo fuerzas para aplastar los dedos contra el teclado y que salga algo coherente (porque... es coherente, ¿no?).

En fin, que todo lo que tengo en la cabeza son cosas como blablabla Pavlov, blablabla condicionamiento clásico, blablabla EI, EC, RI, RC.
Y también algo así como blablabla neurotransmisores, blablabla, crebro, blablabla sinapsis.
Menos mal que tras todo eso, hay una voz mucho más potente diciendo: blablabla casa rural, blablabla, casa rural, blablabla, casa rural.

1 comentario:

Arlekín Negro dijo...

Creo que deberías mayoritariamente hacer caso al título de la entrada, es bastante interesante.

Me entró curiosidad, ¿es cansancio físico? (o quizá debiera preguntar si es sólo físico)

A cuidarse y llamar a ese bichito que llaman inspiración ^^