sábado, 29 de noviembre de 2008

U-hú.

Me encanta eso de sentirme bien, bien, bien. Realmente bien. Con la alegria de haber superado un examen que pensaba imposible. Con fuerzas renovadas para seguir haciendo esto que me gusta. Con ganas de seguir con todo lo que me motiva, y de paso conocer gente que cada día me merece más la pena. No sólo hablo de las clases, también de la impro, de los colegas, de mí misma. Estoy con ganas de cantar esta canción a grito pelao, en medio de la Plaza de Callao en hora punta.


jueves, 20 de noviembre de 2008

miércoles, 19 de noviembre de 2008

Caja de música.

Estoy segura de que alguna vez te ha pasado eso de no poder quitarte una canción de la cabeza. Te levantas y tarareas las primeras notas, vas en el metro y sigues con la primera estrofa, llegas a la universidad y la misma estrofa sigue ahí, repitiéndose una y otra vez. A tercera hora, te das cuenta de que ¡no te sabes otro cacho de la canción! Y cuanto más lo piensas, menos recuedas, sólo esa estúpida frase, que se repite, y se repite, y se repite... y estás harto, y desearías matar a alguien con tal de sacarte esa rima... o a cambio del resto de la canción, como si de un sacrificio humano al dios de la música se tratase, y tu mosqueo aumenta, y ya no quieres cantar más, y no puedes parar, y cuanto más lo piensas, menos puedes parar.

Y entonces, llegas a casa, deseoso de buscar por todos tus archivos musicales, para poder escuchar completa la maldita canción. Pero ¡oh, desgracia! Descubres que no te sabes el título o que no lo recuerdas, y te tiras de los pelos, te muerdes el labio hasta sangrar, te das cabezazos contra la pared... pero nada surte efecto, eres incapaz de recordar el nombre. Y de pronto, una idea genial recore tu mente: buscar en San Google, poseedor de todas las respuestas; pones el trozo de la canción que recuerdas y... se abre un claro en el cielo, tu mosqueo desaparece, la sonrisa vuelve, las ganas de matar disminuyen al nivel normal...

En mi caso, ésta ha sido la culpable de que casi matase a todos los psicólogos de Somosaguas:



"Y todo lo demás, empieza donde acaban mis pies... y todo lo demás, empieza donde acaban mis pies... y todo lo demás, empieza donde acaban mis pies... y todo lo... ¡JODER!"

lunes, 17 de noviembre de 2008

Putos Lunes.

Hoy es lunes, un pesado lunes más a mi espalda. Es horrible el sonido del despertador que marca la vuelta a la rutina después de un relajado fin de semana, y es peor aún cuando el fin de semana no ha sido tan relajante.
Un mini por aquí, un chupito por allá... y acabar abrazando a todo el mundo y diciendo que la vida es maravillosa. Pero de vuelta al lunes, todo el mundo sabe que la vida es una mierda y que lo fantástico es vivir.
Pero es que los lunes son grises, violentos e incómodos. Cuando es lunes hace más frío, Madrid huele peor y la gente es más borde que de costumbre.

El fantasma findesemanil se ríe aún de nosotros y es imposible prestar atención en clase, más para mí, que habitualmente tengo la capacidad de atención nula. Así, es normal que acabe saltándome la segunda clase consecutiva del día de mi (ironía mode on) queridísima(ironía mode off) estadística; suerte que sobreviví a la primera, y sólo porque era práctica.
Eso de que tenga un examen dentro de una semana... da lo mismo. Ante todo autoestima y nada de desesperación, que ya tuve suficiente el curso pasado, en 2º de bachillerato, en el que mi débil corazón estuvo dos semanas al borde del ataque cardiaco.

Ante todo, sobre todo, y a pesar de ser lunes... relax:

Presentación.

Quiero dejar claro que esto no va a ser una agenda para anotar tareas que hacer, sino un diario, mi diario. Va a ser donde deje mis reflexiones dobre la educación, mis vivencias como universitaria, datos interesantes que encuentre por ahí, pensamientos (a veces desordenados, otras veces pulcramente argumentados), mis consejos antiestrés y mi liberación de adrenalina cuando mis propios consejos no me funcionen. Va a ser mi refugio.
Una vez avisados todos, ya puedo empezar con mis más sinceros agradecimientos a aquellos que me sigan y mi más sincero deseo de que encuentren su sitio a aquellos a los que no les guste esto. Pero también quiero pedir el mayor respeto en las opiniones.

Sin más dilación, disfrutad-lo/me.