domingo, 16 de agosto de 2009

Locura.

Me estoy volviendo loca:
huelo el eco
del tacto de tu piel.

martes, 11 de agosto de 2009

Justo antes de dormir.



Pero ahora has vuelto.

domingo, 9 de agosto de 2009

Me rindo.

Me rindo, no sé explicarlo, no sé sacarlo. Quiero escribir hasta que me sangren los dedos, pero es que no soy capaz. Estoy muerta de miedo por las cosas que antes me hacían gracia, por cosas que desdeñaba diciendo el típico "yo nunca seré así". Pero, por otro lado, ahora me río de miedos que tenía antes, pensando "cómo pude ser así".
Nunca he sido mucho de callarme para mí lo que pienso, siempre que he tenido que decir las cosas, las he dicho sin más, porque creo que la verdad y sinceridad siempre deben ir por delante, pero últimamente me planteo si de verdad estoy siendo sincera conmigo misma, y con aqellos que se merecen mi sinceridad; me pregunto si no estoy siendo injusta con aquellos que han sido muy justos conmigo; o si tal vez tal justicia no existe y me estoy enfrascando en inventos humanos y culpabilidades sociales que hasta entonces nunca me habían preocupado.

Me rindo porque me siento a las siete de la mañana frente a la ventana abierta y lo único que soy capaz de describir es el color rosado del cielo, y aún así mis palabras se quedan cortas.

Me rindo porque enciendo cigarro tras cigarro esperando encontrar en su humo respuesta a mis cábalas.

Me rindo, porque me he vuelto una cobarde, tal vez. Y esta afirmación es una de esas cosas de las que yo antes me reía: ¿cobarde yo? ¡imposible!, pues no: es muy posible, nadie es invulnerable a sentimientos tan humanos como ése.
O quizás... quizás en el último momento me entre una repentina valentía que desconocía hasta el momento, y sea capaz de decidir, arriesgando, sin miedo, pero con cuidado.

No sé... es que no sé. No sé qué está bien. No sé por qué tendría que estar mal. No entiendo por qué la vida se empeña en darle vueltas de 180º a las circunstancias de vez en cuando. No entiendo por qué me afectan tanto los cambios que anes esperaba, los cambios que he estado esperando hasta hace no mucho.

Repito tanto la palabra "quizás" en mi cabeza, que ésta ha dejado de tener sentido. Y por eso, por ese tipo de remolinos, por esa clase de sentimientos he decidido dejar que hoy sea la brisa quien arrastre los hechos, unos tras otros hasta construir la historia, tal vez mañana vuelva a coger las riendas de mi destino. Hoy, lo digo en serio, me rindo.

miércoles, 5 de agosto de 2009

De mi perfección.

Algo que me jode muchísimo es que me digan que soy perfecta (sí, bueno, puede parecer algo increíble, pero alguna vez me lo han dicho). Me molesta muchísimo elevado al infinito, más o menos.

No sólo porque soy una de esas personas que piensan que la perfección no existe (y si soy perfecta, entonces no existo, pero, tonterías aparte...), sino porque no lo soy. Así de simple: no soy perfecta. Me da por enfadarme y soy un demonio con cuernos que antes no se veían por ningún lado, egoísta, borde, calculadora y fría. Meto la pata constantemente, a pesar de todo el empeño que pueda poner en lo contrario, es que soy torpe hasta el extremo. Me enervo fácilmente, y ni se te ocurra comprobarlo mirándome fijamente durante mucho tiempo, llamando mi atención con tu dedo insistente en mi hombro o mintiéndome en la cara, porque te aseguro que entenderás que lo que trato de decir: mi límite de paciencia para ciertas cosas está al nivel de los tobillos. Cuando tengo que decir la verdad, suele darme lo mismo dañar, la verdad es la verdad, y duele, pero es lo que hay: o la afrontas o eres débil; y si eres débil... no creo que seas mucho de mi agrado, no soporto a los que lloran con cada uno de los golpes, y no quiero decir que no se pueda llorar, que yo he llorado como la que más... pero este no es el tema de hoy: quien quiera entender, que entienda; el que no quiera, que me malinterprete y el que quiera entender y le cueste, que lea a Niezstche sin escuchar los prejuicios que lo llaman nazi.

Por si fuera poco, a parte de esos pocos defectos descritos ahí arriba 8una mínima parte de una gran lista), estoy pasando por una época ácida, muy ácida. Hastío, podríamos llamarlo. Tengo los sentimientos a flor de piel, igual me da por reír a carcajadas durante horas como me da por no hacerme ni puta gracia nada de lo que nadie pueda decir y me pongo seria de pronto por una palabra que alguien ha dicho y de la que ya no se acuerda... y lo pago con todo el mundo, con unos más que con otros.
Si esto es ser perfecta, debo de ser la persona más perfecta que existe. Pero sospecho que la definición de perfecta no incluye tantos puntos malos e inestables.

Dejemos algo claro: no me importa que me halaguen (no voy a ser tan hipócrita diciendo eso), no me importa que de vez en cuando caiga en gracia a alguien porque ha visto mi parte buena. También me gusta de vez en cuando que me echen un piropo o que barran un poco los defectos para fuera, pero sabiendo que están ahí. Lo que me importa es que sólo con ver la parte buena se juzgue a una persona, y me molesta tanto o más que siendo al revés, juzgando a una persona por su parte mala. En esta vida, las monedas tienen dos caras, y nadie debería decidir que una moneda es bonita sin haber visto su cruz.

Si alguien se va a atrever a dar un juicio sobre mí, que se moleste en conocerme. Que sopese si lo bueno compensa a lo malo. Para unas personas será así, para otras lo malo será motivo de salir corriendo y no volver la vista atrás. Estupendo, pero que nadie diga (ni de mí, ni de nadie) que una persona es completamente asquerosa, o completamente perfecta.

Espero haberme explicado con claridad.

domingo, 2 de agosto de 2009

He aquí.

Estaba yo... llamémoslo "estudiando" para métodos, cuando me acordé de la vieja y repugnante broncosaurio que tenemos por profesora... Esa buena mujer con unos 150 años, mes arriba, mes abajo, que se encarga de amargar el día a sus alumnos por pura diversión (y en su casa se mira en el espejo mientras se rie con el recurrido "muahahahahaha" mientras se suena sus bonitas narices con los trabajos de sus queridos pupilos).
El caso es que pensé: "por lo menos no soy la única" y es que dicen que mal de muchos consuelo de tontos... y yo debo de ser muy tonta. Y me animé un poco (cruelmente, lo reconozco) pensando que queda menos apra septiembre y que allí me reencontraré con compañeros que oye, son como las mascotas, nunca les prestas suficiente atención, hasta que no están ahí para divertirte. Y, en esto, seguí hilando ensamientos (algo increíble) y recordé a uno en particular, mi mascota preferida, se podría decir... sí, sí, éste es EL post.

Como el destinatario habrá comprendido ya (o a lo mejor estoy esperando mucho de él XD), esto es un encargo que yo realizo con mucho cariño. Un encargo para Antisocialito, a.k.a. Miguelón. Hace mucho tiempo, cuando le descubrí mi profundo blog, él me dijo que quería un entrada, y yo he ido sudando de él... pero oye, ahora que me aburro y no tengo nada que hacer (¿quién dijo Métodos?) me propongo a escribirle. A lo mejor, estoy segura, de que le decepcionará ver que no nombro su grandilocuencia... es que me cuesta mucho mentir (¡toma! ¡qué ingeniosa soy!).

Dento de un par de meses, hará un año que llegué yo a mi primera clase de la carrera, todo emocionada con un montón de folios apra apuntar lo que los profesores querrían decirme (ahora que lo digo así, me recuerdo a Hermione, sí la de Harry Potter). miré a mi alrededor, y me fijé en mucha gente: primero un tipo con una camiseta del metro de Lavapiés ("¡eh! ¡este tipo tiene que molar!", pensé), luego una chica con muletas, morena, o como diríamos ahora ¡Morrrrrreeeeeena!, unas cuantas chicas tontas, que me lo siguen pareciendo, a mis compañeras del curso cero... y allí que fui con ellas("¡alguien conocido!"). Seguí repasando la vista y llegué a un tipo, sentado sólo en una fila de bancos, con la cabeza apoyada en los puños y cara de mala hostia, mirando a todos con expresión de "quiero mataros" (aunque luego lo desmintiera). Y le di un codazo a la que estaba a mi lado y le dije, con ilusión: "¡mira! un antisocial! Éste a mitad de curso, o antes, nos mata a todos".
Un par de semanas más tarde, hablé con él por primera vez, en el A, de vuelta a Moncloa. y supe que se llamaba Miguel, y que no era tan antisocial como yo pensaba. Era simpático y todo, para mi sorpresa. Más adelante, después de algo más de un mes, o dos, cuando ya teníamso "confianza" me di cuenta de que tal vez no fuera un antisocial, pero que lo de simpático le quedaba un poco grande... más borde el tío... claro que luego entendí que eran coñas y eso, y desde que entendí eso, no me corté en devolverle las pullitas. Y hasta ahora, que todos sabemos que es un tío con caparazón de antisocial, pero más bueno que un santo... bueno, quizás exagere... un poco cabrón sí es... pero es uno de esos cabrones a los que se le coge cariño.
Además, mi cariño se redobló un poco el día que descubrí con asombro (en esa demoniaca red social que es el tuenti) que leía a Pratchett y a Scott Card, que conocía al "Contigo no, bicho" y que era un friki de los Simpson. Además, fue a uno de los pocos que no tuve que explicarle el por qué de que apodara a uno de la clase como "Logan", sólo me dijo: "friki", claro, que él también lo era.

Y así estamos, los dos estudiando un montón para la torre de suspensas que tenemos... Ah... ¿que no? bueno, eso.

Y que es un tipo majete él, con una coletilla de delincuente juvenil, cara de antisocial, respuestas punzantes (e increíblemente inteligentes... a veces [NEGARÉ HABER DICHO ESTO]) para todos y una sonrisita siempre que a veces dan ganas de borrarle. Y que, como he dicho antes, es una mascota a la que echar de menos... ¿Con quién me meto yo si no está? Sería muy duro estar en clase... bueno, a lo mejor no... aunque echaría de menos los "¡Eh, Patry! ¡Que quedan dos horas de Estadística, ¿no lo sabías? Todavía no puedes irte..." y yo contestarle: "JAJAJAJAJA" para irme después.

Aquí tienes tu entrada, so pesao. Espero que no sea mucho de tu agrado, aunque yo me he esmerado, ¿eh?

Y, para terminar, voy a poner algo que seguro que te hará mucha ilusión acompañado de tu reacción, que a mí me encanta (más que nada porque me suplicas, y eso... me hace sentir guay XD):


Miguelón:
Por.......dios......bendito.................y el gobierno se niega a darle a mi familia un susidio por tenerme despues de esta foto??? Jesus bendito esta foto es la definicion universal de "foto tuenti" xDDD
PD: obviamente ya me se la respuesta, pero aun asi hare la pregunta: hay alguien mas a parte de mi que piense que parezco un puto criter?? xDD por dios patry QUEMA esta foto y luego quema la camara te lo suplico



PD: tómalo como un regalo de cumpleaños un poco atrasado :D